Aprende a hacer un delicioso puré de tomate casero en pocos pasos

14/01/2024 - Actualizado: 18/03/2024

tomates frescos y maduros

El puré de tomate casero es un ingrediente muy popular y versátil en la cocina. Se utiliza en una gran variedad de platos, como salsas, sopas, guisos y más. La ventaja de hacerlo en casa es que puedes controlar los ingredientes y obtener un sabor y una textura excepcionales. Utilizar tomates frescos y naturales es fundamental para lograr un puré de tomate casero delicioso y saludable.

Índice
  1. I. Elige los tomates adecuados
    1. II. Preparación de los tomates
    2. III. Cocinar el puré de tomate
    3. IV. Triturado y conservación del puré de tomate
  2. Conclusión

I. Elige los tomates adecuados

Para hacer un puré de tomate casero de calidad, es importante elegir los tomates adecuados. Las variedades recomendadas son el tomate pera y el tomate Roma. Estos tomates son más carnosos y tienen menos agua, lo que los hace ideales para obtener un puré con una textura espesa y sabrosa. Además, asegúrate de elegir tomates maduros y jugosos para obtener el máximo sabor.

II. Preparación de los tomates

A. Lavar y pelar los tomates

Antes de utilizar los tomates, es importante lavarlos cuidadosamente para eliminar cualquier suciedad o residuo. Puedes hacerlo bajo agua corriente y frotándolos suavemente. Una vez lavados, necesitarás pelar los tomates. Para pelarlos fácilmente, puedes hacer un corte superficial en forma de "X" en la base de cada tomate y luego sumergirlos en agua hirviendo durante unos segundos. Luego, retíralos del agua caliente y colócalos inmediatamente en un recipiente con agua fría. La piel se aflojará y podrás pelarlos fácilmente.

B. Retirar las semillas y el exceso de agua

Para obtener un puré de tomate con una textura suave y libre de grumos, es importante eliminar las semillas y el exceso de agua. Puedes hacerlo cortando los tomates por la mitad y utilizando una cuchara para retirar las semillas. Luego, coloca los tomates en un colador y déjalos reposar durante unos minutos para que suelten parte del agua. Puedes presionar suavemente los tomates con una cuchara para acelerar el proceso.

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III. Cocinar el puré de tomate

A. Sofreír la cebolla y el ajo

Antes de agregar los tomates, es recomendable sofreír la cebolla y el ajo para agregar más sabor a tu puré de tomate casero. Puedes cortar la cebolla en trozos pequeños y picar el ajo. Luego, en una olla grande, calienta un poco de aceite de oliva y añade la cebolla y el ajo. Sofríe a fuego medio hasta que estén dorados y fragantes.

B. Añadir los tomates y condimentos

Una vez que la cebolla y el ajo estén dorados, es momento de agregar los tomates. Corta los tomates en trozos grandes y agrégalos a la olla. También puedes añadir condimentos como sal, pimienta, azúcar y hierbas frescas como albahaca o perejil para realzar el sabor del puré de tomate.

C. Cocción a fuego lento

Es importante cocinar el puré de tomate a fuego lento para permitir que los sabores se fusionen y los tomates se deshagan completamente. Debes cocinar a fuego bajo durante al menos una hora, removiendo de vez en cuando para evitar que se pegue. Si quieres obtener un puré de tomate más espeso, puedes cocinar durante más tiempo hasta que alcance la consistencia deseada.

IV. Triturado y conservación del puré de tomate

A. Triturar el puré de tomate

Una vez que el puré de tomate esté cocido, es hora de triturarlo para obtener una textura suave y sin grumos. Puedes utilizar diferentes métodos para triturar el puré. Si prefieres una textura más fina, puedes utilizar una licuadora o una procesadora de alimentos. Si prefieres una textura más rústica, puedes utilizar un exprimidor manual o simplemente aplastar los tomates con un tenedor.

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B. Envasado y conservación del puré de tomate

Para conservar el puré de tomate casero, es importante envasarlo adecuadamente. Puedes usar frascos de vidrio esterilizados para almacenar el puré en el refrigerador o el congelador. Si quieres conservarlo por más tiempo, puedes utilizar la técnica de conserva en caliente. Para ello, llena los frascos esterilizados con el puré de tomate caliente, ciérralos herméticamente y colócalos en una olla grande con agua hirviendo durante unos minutos. Luego, retira los frascos del agua y déjalos enfriar antes de almacenarlos en un lugar fresco y oscuro.

Conclusión

Hacer un puré de tomate casero delicioso y saludable es más fácil de lo que parece. Siguiendo estos simples pasos, puedes disfrutar de un puré de tomate fresco, con un sabor y una textura excepcionales. Anímate a probar esta receta y experimenta con diferentes condimentos y variaciones para hacer tu puré de tomate casero aún más especial.

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Maite Blanco

Maite Blanco, nutricionista y amante de los tomates. En el blog, comparto información sobre los beneficios para la salud de estos frutos rojos. ¡Aprende a integrarlos de manera deliciosa en tu dieta diaria!

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